La Sal, en Asia, es considerada como símbolo de purificación. En Japón por ejemplo es común poner platitos con sal en la entrada de restaurantes para protegerlos contra malos espíritus. También es utilizada en rituales shintoístas y antes de empezar combates de sumo.
Motoi Yamamoto es un artista japonés que utiliza este elemento como base para construir sus obras. Tras la muerte de su hermana por cáncer cerebral, Motoi Yamamoto comenzó a construir laberintos enormes y detallados como ejercicio necesario para su recuperación. En su web, se pueden ver algunas de sus instalaciones, pinturas, dibujos y esculturas.
Excelente arte con sal. Un artista muy minucioso sin duda.